jueves, 20 de diciembre de 2012

Preguntas estúpidas (1): El fin del mundo

Mi primera entrada programada de estas navidades es para vuestro entretenimiento, que sé que os gusta discutir sobre cualquier cosa que horrorizaría a más de un tertuliano radiofónico.

Durante esta semana he sido consultado innumerables veces sobre lo que pasaría si se produjese una inversión de polaridad del campo magnético terrestre. Al parecer ha sido nominada ésta como la más probable razón para que acabe el mundo mañana. Dejando a parte que semejante patochada se basa en uno de los más de 400 calendarios mayas que se conocen hasta el momento, sólo en uno. Parece que la lluvia de meteoritos, la invasión extraterrestre, la aparición de un espectral planeta errante, el fallo en el acelerador de partículas de Ginebra o la pandemia universal han sido descartadas de un plumazo por ser demasiado improbables.

Ahora bien, como si se tratase de una especie de histeria colectiva he tenido que desmontar peregrinas teorías sobre que la Tierra detendrá su giro completamente y empezará a girar al revés (cuanto daño ha hecho "Superman: la película" (1978)), que la radiación solar nos exterminará completamente (o peor, nos convertirá en zombis mutantes) o que la energía eléctrica dejará de funcionar completamente (esto último es culpa de esa "gran" serie que es Revolution).

Obviamente, la pregunta que te hago es (y no es que pasará, lo tengo claro, nada):

¿Qué ha llevado a la gente a contemplar con tanto pavor un concepto que apenas comprenden?

Es gracioso que semejante teoría se desmonta con un rápida visita a la Wikipedia (mi gran Satán), donde después de leer el artículo dedicado a la Reversión geomagnética (vale, no todo el mundo es capaz de llegar a semejante artículo, no todos los caminos de Google llevan a él) sólo se puede concluir que nada malo puede pasar en principio si nuestros ancestros sobrevivieron a 17 de ellas sin más protección que el cielo que nos cubre.

En fin, "sería triste que el mundo se acabase cuando diésemos a nuestros alumnos las notas de este trimestre, sería demasiado parecido a una película de Lars von Trier".

8 comentarios:

  1. Si mañana se acaba el mundo, mas le vale que sea antes de mi examen de EDp a las y media, ¡porque si no monto una monumental!

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  2. No pasa nada si se acaba El Mundo, seguirá el Marca, el As y El Pais.

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  3. El fin del mundo sería la única medida coherente que podría achacarse a Rajoy para acabar con la crisis; 0 paro, 0 deuda, vamos 0 de todo. Un éxito TOTAL.

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  4. ¿Dónde hay que firmar ya para que se termine el mundo?

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  6. Seguro que, a partir del 21 de diciembre, el 19 de enero de 2038 será más importante.

    En la década de los 60, las primeras versiones de Unix medían el tiempo del sistema en intervalos de 1/60s, debido a los 60 Hz de la frecuencia de los osciladores en aquella época. Esto significaba que un entero sin signo de 32 bits sólo podía representar un lapso de tiempo inferior a 829 días. Por esta razón, el tiempo representado por el número 0 (llamado la época o epoch) tuvo que ser aplicado en el pasado muy reciente: 01/01/1971. De hecho, la primera edición del Manual del Programador de Unix del 3 de noviembre de 1971 define el tiempo Unix como "el tiempo desde las 00:00:00 de 1 de enero de 1971 medido en sexagésimos de segundo".

    Más tarde, los intervalos se incrementaron a un segundo (1HZ DC), lo que aumentó el lapso de tiempo que podría ser representado a alrededor de 136 años y, como el periodo de representación era más amplio, el epoch se redondeó a 01/01/1970. Haciendo cálculos, un entero con signo de 32 bits puede representar números enteros entre -2147483648 y 2147483647, es decir, el rango representable en el tiempo Unix va desde las 20:45:52 GMT del 13 de diciembre de 1901 a 03:14:07 GMT del 19 de enero de 2038...
    Seguro que lo acabas de pensar: a partir de esa fecha todos los equipos que aún utilizan 32 bits y miden así el tiempo sufrirán un desbordamiento de entero...

    Esto se conoce como el "problema del año 2038" y algunos creen que será más importante que el del año 2000. La solución ya está en la mayoría de sistemas operativos de 64 bits: el uso de un signo de 64-bit presenta una nuevo periodo medible veinte veces mayor que la edad estimada del universo, aproximadamente 292 mil millones de años (tranquilos, no necesitaremos tanto tiempo para destruir la Tierra antes).

    Pero muchos de ellos no serán actualizados en esa fecha... Hoy, miles o millones de sistemas embebidos utilizan Unix/Linux y, seguramente, muchos de ellos no serán actualizados en esa fecha... Muchos quieren e insisten en hacer coincidir el fin del mundo con el calendario Maya pero, ¿por qué no con el fin del "tiempo Unix"?...

    De Hackplayers.

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